Tal y como lo establece la ley, los escombros de una obra, deben depositarse en un contenedor especial ubicado estratégicamente cerca del lugar. El fin es facilitar la retirada de los mismos por parte de los servicios encargados de su recogida.
¿Qué tipos de escombros puede producir una obra?
Se consideran escombros de una obra aquellos desechos que se generan de la construcción, remodelación, restauración o demolición de una obra civil. Como son edificios, vías, puentes, túneles y minas entre otros.
Los escombros están compuestos por materiales muy variados, desde ladrillos, piedras, restos de hormigón, hierro o metal, madera, vidrio hasta materiales tóxicos o de riesgo a la salud, como por ejemplo los de retirada de uralita o amianto.
Los materiales con riesgo de toxicidad deben ser recogidos y trasladados para su gestión con protocolos especiales por empresas inscritas en el RERA, acreditadas para el manejo de dichos materiales.
La legislación en la recogida de escombros de una obra
La recogida y gestión de los residuos de construcción y demolición (RDC), se debe realizar conforme a lo establecido en el R.D. 105/2008 según en el artículo 3.a de la Ley 10/998 de 21 de abril. En esta legislación se establece todo lo referente a la producción, recogida y gestión de escombros y residuos de obra y demolición.
De acuerdo a esta legislación los residuos de construcción y demolición (RDC) mejor conocidos como escombros de una obra, se clasifican en tres grupos: residuos inertes, residuos especiales y residuos no especiales.
Los residuos inertes y los no especiales son residuos no peligrosos, pero los residuos especiales, son de naturaleza potencialmente contaminante o tóxica, que requieren tratamiento y protocolos de gestión diferentes, pues son residuos que se rigen bajo una legislación especial.
¿Quién se encarga de la recogida de escombros de una obra?
Cuando se realiza una obra civil, de antemano debe contratarse una empresa especializada que se encargue de la recogida y gestión de los escombros producidos en dicha obra. Para ello, la empresa contratada proporciona el o los contenedores especiales para la recogida de escombro.
Los contenedores para la recogida de escombro, son contenedores especiales diferentes de los contenedores que se usan para el depósito de deshechos del hogar y desechos para reciclaje. Y están dimensionados acorde con los residuos producidos en la obra.
Para recoger escombros y gestionarlos, las empresas encargadas ofrecen los servicios de recogida en contenedores de diferentes capacidades, según la obra. Las capacidades de contenedor más utilizadas son 3m3, 6m3 y 10m3.
¿Por qué deben usarse contenedores para los escombros de una obra?
Los escombros de una obra suelen producirse en grandes cantidades y sus dimensiones varían según el tipo de escombro, pudiendo llegar a ser elementos bastante voluminosos. Por lo que tirarlos en los contenedores de uso doméstico es impropio.
Para deshacerse de estos escombros hay dos opciones: en contenedores especiales o en un punto limpio. En el caso de los contenedores especiales, se contratan en empresas especializadas en la recogida de escombros de obra.
Al contratar una empresa que suministre los contenedores, la misma se encarga de suministrar el contenedor adecuado y también de gestionar los materiales que se han descartado como escombros, recogiéndolos y llevándolos a plantas recicladoras.
El reciclaje de los escombros de construcción permite dar un segundo uso a los materiales, genera empleos en las empresas recicladoras y evita el desecho de materiales en áreas inapropiadas, que generan contaminación visual.
¿Cómo se usa un contenedor de escombros de obra?
Para el uso de contenedores, se debe solicitar previo a la realización de la obra, la licencia legal correspondiente, participando la instalación del contenedor de escombros, y determinando que la misma no alterará el tránsito de peatones y vehículos.
En el caso de que los escombros producidos sean demasiado voluminosos, los mismos deberán reducirse a su mínima expresión y si al término del día no se ha finalizado, el contenedor debe taparse para impedir que se desprendan materiales y polvo, o que terceros tiren otro tipo de residuos en el mismo.
Los escombros de una obra almacenados en el contenedor no deben sobrepasar las aristas superiores del mismo. Al alcanzar el volumen máximo permitido en el contenedor, se debe solicitar a la empresa su retirada y sustitución.
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