Gestionar los residuos es un paso importante en el proceso productivo de todas las empresas. Sin importar al área al cual se dediquen, cualquier sustancia desprendida de su actividad debe gestionarse. Para esto pueden acudir a un gestor o elaborar un plan propio.
¿Por qué se gestionan los residuos de la industria?
Todas las actividades industriales generan de una u otra forma sustancias y materiales de desecho. Dichas sustancias pueden almacenarse en el medio ambiente o en algunas partes de los urbanismos, pudiendo afectar la calidad de vida.
Por otra parte, la mayoría de empresas obtienen sus recursos directamente del medio ambiente. Es decir, utilizamos recursos renovables y no renovables, pero la tasa de recuperación de los mismos es muy lenta en comparación a su uso.
Es por esto que la salud pública se encarga de que sea obligatorio gestionar los residuos producidos por las empresas. De esta forma, se puede disminuir el impacto negativo en el medio ambiente y, así, evitar la proliferación de enfermedades en la población.
Por otra parte, el re-uso y el reciclaje permiten que los materiales se aprovechen varias veces. Así se evita utilizar directamente los recursos provenientes de la naturaleza.
El reciclaje convierte algunos materiales descartados en materiales nuevos para otros procesos productivos. En cambio, el re-uso permite prolongar la vida útil de un recurso.
En un plan de gestión de residuos se contempla el reciclaje y el uso de los materiales de desecho. También se organiza su manejo de manera que sean recolectados, transportados y dispuestos eficientemente.
¿Cuántos pasos tiene la gestión de residuos?
No existe un único plan para gestionar los residuos. De hecho, cada empresa puede elaborar su propio esquema en función de los materiales y procesos que implemente. En términos generales, cualquier plan debe contener lo siguiente:
Recuperación y recogida de los residuos
Implica todas las técnicas de separación de los residuos producidos. Para esto se pueden utilizar contenedores y jaulas.
Transporte
Es la etapa donde se llevan los residuos desde el sitio de origen hasta la planta de tratamiento. La empresa puede contratar a otra empresa que se encargue del desplazamiento o puede hacerlo por sus propios medios.
Tratamiento
Por lo general, el tratamiento de los residuos no se lleva a cabo en la misma empresa que los origina. Es la parte final del plan y es la etapa donde se valoran, eliminan o preparan los materiales para:
- Valorización y reciclaje del material
- Biometanización
- Compostaje
- Tratamiento biológico o mecánico
- Reciclaje de tierras y escombros
- Selección y tratamiento de materiales voluminosos
- Trasvase
- Valoración y reciclaje de material
- Plantas de selección
- Incineración
- Gasificación
- Pirólisis
- Depósito en vertederos
Existen empresas dedicadas a gestionar los residuos. Por lo general este tipo de organizaciones cuenta con la autorización del gobierno, por lo que su protocolo es totalmente legal.
Residuos producidos a nivel industrial
Normalmente los residuos producidos a nivel industrial pertenecen a dos categorías: Inertes o peligrosos. Por lo tanto no pueden desecharse junto con los residuos domésticos. A continuación explicamos en qué consiste cada uno.
Los residuos peligrosos
Son desechos que contienen componentes físicos, químicos o biológicos que pueden resultar una amenaza para el ambiente o las personas. También son aquellos objetos que al entrar en contacto con otros agentes liberan sustancias tóxicas y muy peligrosas.
Las sustancias inflamables, residuos químicos, combustibles, pinturas, reactivos y demás se consideran residuos peligrosos. Existen empresas que se dedican exclusivamente a la recogida, transporte y tratamiento de este tipo de desechos.
Los residuos inertes
Por otra parte, se consideran residuos inertes aquellos que no son peligrosos, pero tampoco pueden reutilizarse fácilmente. Es común que su tamaño y volumen sean grandes, pero no generan problemas ambientales serios.
Otras categorías de residuos
Existen residuos de riesgo biológico que provienen de hospitales y laboratorios. Por ejemplo, jeringuillas, apósitos y material asistencial, que presentan un riesgo de infección y contaminación.
El tratamiento más común para este tipo de residuos es la incineración por encima de los 850 grados centígrados. En esta categoría también encontramos los desechos de actividades agrícolas, los residuos procedentes de centrales nucleares y los procesos radiactivos.
Recuerda que gestionar los residuos correctamente es una tarea más en la empresa, por lo tanto, no debes dejarla de lado. Podrías recibir amonestaciones y multas si no llevas a cabo un plan adecuado.
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